FUROSHIKI: EL ARTE JAPONÉS DEL ENVOLTORIO EN TELA

En la tradición japonesa, donde el regalo y la ofrenda cumplen una función ritual, además de social, el envoltorio en tela, o FUROSHIKI, ocupa un espacio diferenciado. Se trata de unos pañuelos decorados, en distintos tamaños, que sirven tanto para presentar el regalo al que lo recibe, como para simplemente envolverlo o transportarlo.

Se comenzó a emplear a mediados de la Era Nara (años 710 hasta el 784), en los baños tradicionales japoneses (Ofuro), para no confundir o mezclar la ropa, así utilizaban el Furoshiki y dejaban su vestimenta encima de ella. Eventualmente su uso se difundió y comenzó a ser utilizada por comerciantes para proteger sus mercancías o sus regalos.

Durante siglos estos envoltorios han sido un tesoro familiar y una de las más bellas representaciones textiles del refinamiento de las artes aplicadas japonesas. Sus diseños y técnicas son reflejo de distintos estilos, lugares y épocas históricas, costumbres y oficios artesanales de Japón. Hoy encuentran su actualización en la moda y el reciclaje, ofreciendo enormes posibilidades a las personas creativas para redescubrir su función.

Actualmente el Furoshiki está hecho de diferentes telas, incluyendo seda, algodón, rayón y nylon. Y aunque este arte se sigue ocupando en Japón, su uso ha ido decayendo, debido a la gran demanda de bolsas de plástico que existe hoy en día.

En los últimos años el ministerio de medio ambiente japonés ha hecho algunas campañas para promover el uso de Furoshiki en la actualidad, para lograr proteger y cuidar el medio ambiente en Japón y en el mundo.

Imagen del Ministerio de Medio Ambiente de Japón