La literatura recoge numerosas evidencias de que el estrés y la angustia reducen el éxito de la fertilización in vitro

Los resultados, según indica la Dra. Nathalie Rapoport-Hubschman, directora de la investigación, sugieren que técnicas como la meditación mejorarían las probabilidades de embarazo. “Existen cada vez más evidencias de que el estrés y la angustia reducen el éxito de la fertilización in vitro (FIV). Pero las evidencias de los efectos de otros factores psicológicos no son concluyentes”.
La teoría expuesta por los autores defiende que los mecanismos para contrarrestar problemas como la ansiedad y la angustia influirían en el éxito de la FIV. Así, y mientras que esas estrategias orientadas a los problemas son una forma efectiva de superar situaciones que una persona puede controlar, el equipo sugiere que las estrategias “orientadas a la emoción” serían una forma no tan estresante de sobrellevar el tratamiento de la infertilidad.
“Altamente incontrolable”
Los autores estudiaron a 88 mujeres que se sometieron a FIV, de las que 21 quedaron embarazadas. Los únicos factores que influyeron independientemente en el éxito de la FIV fueron la edad de la mujer y su propensión a relajarse ante la situación en el momento basal del estudio.
Como apuntan los autores, el tratamiento de FIV es “altamente incontrolable. Y cuando es imposible el control, lo más efectivo es concentrarse y regular las emociones asociadas”.
Las mujeres que no usan ese enfoque pasarían más tiempo preocupadas y pensando si quedarán o no embarazadas, una situación que puede afectar a varios sistemas del organismo. “El siguiente paso lógico sería probar si la meditación, orientada a ceder el control, mejoraría los resultados reproductivos en mujeres bajo tratamientos de FIV”, concluyen los autores.
(Fuente: jano.es)